Yo siempre te agradecí todo lo que hiciste por mí, empezando por quemarme la casa... cobré un fangote del seguro... o sea me dieron un pedazo de barro gigante... vos a la música le agregaste todo lo que mambrú ahora le sacó... pero eran otras épocas, antes los muchachos se tiraban gomina... ahora las minas te tiran la goma... yo usaba gelatina sabor frutos del bosque en el pelo, así sentía la frescura de las montañas... me decían mis amigos que era en realidad porque estaba en Junín de los Andes y que la sensación es esa... pero no les creí una palabra...
Salir en La Nación no es lo mismo que hacerlo en La Provincia de Buenos Aires, o en Resistencia... que es la ciudad de los electricistas... así como Berazategui es la capital nacional de la cloaca...
Te cité porque me pareció justo... justo me había quedado sin qué decir... pero lo hice porque a buen entenedor pocos encuchillos...
A mí me pasó de enfrentarme a las mafias que están detrás de los locutorios... una vez me metí en uno y llegué al fondo y los encontré... contando dinero y chistes... me decían hippie sucio y yo les dije que con ellos descubrí el amor, pero con la mafia el dolor, con Mandela al hombre de color y con Berazategui el mal olor...
Yo no voy al dentista porque me toca los dientes y me siento violado, lo raro es que ese problema no lo tengo con el proctólogo... o sea que supongo que si el proctólogo me pusiera la mano en la boca también no habría problemas...
Una vez Gustavo, el de GAS, o sea que está al pedo, no como el otro Gustavo que es un pedo... me dijo de poner una disquería... pero yo no quería... creo que uno de los socios iba a ser Napolitano, le voy a preguntar: Te acordás Napo? cómo era el asunto...
Me pareció gracioso vender discos de pasta... el problema es que los molía y me los aspiraba, y el otro los hervía y les ponía tucco... Qué tiempos aquellos... hicimos plata! mucha, porque teníamos una imprenta ilegal... y con eso recuperábamos, el problema es que los peso Ley nos salían con Alfonsín en vez de San Martín, y cuando lo corregimos nos equivocamos y pusimos una foto del tren homónimo... como nos reímos con Homónimo y con su primo Gerónimo... aaaaaaaah! Hasta que me cansé y lo pusimos a Monseñor Laguna... pero justo hubo una inundación y nos cagó todo... menos los billetes... que flotaron hasta el más allá donde se convirtieron en angelitos de papel y se unieron felices a sus ancestros...
aaaaaaah!
El Epson Blanco y Negro como Gary
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